Precalentamos el horno a 250 grados.
Lavamos bien los champiñones para quitarles toda la tierra y les cortamos los tallos (los guardamos para preparar otras recetas como estos raviolis de calabacín o para incluirlos en una ensalada)
Ponemos los “sombreritos” en una bandeja para horno, les espolvoreamos sal y pimienta por encima y un poquito de aceite. Los metemos al horno que tenemos ya caliente a 250 grados, durante 10 minutos.
Picamos finamente la cebolleta y la pochamos en una sartén con unas gotas de aceite.
Cuando la cebolleta esté ya hecha, picamos finitas 3 lonchas de jamón serrano y se lo añadimos a la sartén. Le damos unas vueltas con la cebolleta y salpimentamos a nuestro gusto.
Rellenamos los champiñones con la mezcla de cebolleta y jamón.
Para terminar, y aprovechando que tenemos el horno encendido, hacemos un crujiente de jamón con las 2 lonchas que nos sobran. Para ello, metemos las 2 lonchas en el horno y las dejamos entre 3-4 minutos. Al sacarlas, deberán estar duras y se nos “cascarán” en la mano. Desmigamos el jamón con las manos, con un cuchillo o con un mortero y espolvoreamos las virutas crujientes por encima de los champis rellenos. Este crujientito les da el toque maestro!